El entrerriano avanzó desde el fondo, pero un problema en el motor lo privó de terminar entre los diez mejores. “Parece que estamos meados por un elefante”, lamentó Mariano Werner, quien llegó 15º en la final de TC en Termas.
El TC disputó este fin de semana su quinta fecha de la temporada en el autódromo de Termas de Río Hondo, donde Mariano Werner protagonizó una gran remontada luego de haber partido desde el puesto 26° en la grilla. Gracias a un ritmo sólido y maniobras efectivas, el entrerriano logró meterse en el top diez cuando promediaba la competencia.
Sin embargo, cuando parecía que podía ir por más, un fallo en el motor complicó sus aspiraciones. el paranaense perdió varias posiciones sobre el cierre de la carrera, aunque logró mantenerse en pista y cruzó la bandera a cuadros en la 15º colocación, sumando puntos importantes pese a las dificultades.
Tras la competencia, el piloto expresó su frustración por lo sucedido. “Fue una pena, le pido disculpas a los sponsors, hinchas, a todos. Parece que estamos meados por un elefante”, lamentó con sinceridad.
El potencial estuvo, pero la suerte no acompañó
Werner destacó que, pese al resultado, el rendimiento del auto fue muy bueno durante todo el fin de semana. “Hoy tuvimos un gran auto, en condiciones normales estaba para estar entre los cinco primeros, pero las carreras se terminan con la bandera a cuadros”, explicó.
A pesar del inconveniente mecánico, el “Zorro de Paraná” se mostró combativo en pista. “Cuando se puso en 5, me concentré en correr a morir, en ser rápido, en los frenajes, en todo, a ver si aguantaba”, relató sobre su estrategia durante los últimos giros.
Además, contó que el equipo hizo todo lo posible para mantener el Ford Mustang en condiciones óptimas durante la competencia. “Pusimos un juego de bujías en cada oportunidad en que salimos a pista”, detalló sobre el esfuerzo técnico que realizaron.
Compromiso intacto y mirada hacia adelante
Consciente de que las situaciones adversas forman parte del automovilismo, Mariano Werner aseguró que no bajará los brazos. “Las rachas malas hay que pasarlas y hay que trabajar más que nunca”, afirmó en Campeones, dejando en claro que ya piensa en lo que viene.
Ahora, el piloto y su equipo se enfocarán en analizar lo sucedido en Termas y preparar el auto para la próxima cita del campeonato. El objetivo sigue siendo claro: pelear entre los mejores y dejar atrás los contratiempos que lo han condicionado.
