La Academia venció a Patronato y alcanzó su décimo triunfo al hilo, la mejor racha de su historia en el profesionalismo. Apenas ocho equipos pudieron conseguir esa marca consecutiva de victorias.
Diez triunfos consecutivos no se consiguen todos los días. La campaña de Racing, con Fernando Gago como entrenador, no solo es una de las más importantes del club, sino del fútbol argentino, en especial en su etapa profesional. La Academia versión 2022 superó a la de 1967, que con Juan José Pizzuti como entrenador ganó 9 partidos seguidos. Y es la quinta racha más larga del club, que comenzó a jugar en Primera División en 1911.
Antes de Gago y de Pizzuti, hay que remontarse a la etapa amateur para encontrar otras rachas exitosas, contabilizando todas las competencias oficiales. La mayoría las logró en la época que se ganó el mote de Academia, tiempos en los que fue heptacampeón entre 1913 y 1919.
En aquel momento aún no existía la figura del director técnico. Al equipo lo armaban los principales dirigentes con los jugadores con mayor influencia en el plantel. Después aparecieron los entrenadores (que eran preparadores físicos) y luego los DT (ex jugadores). El primero fue Armando Reyes, en 1931, quien había sido jugador y multicampeón entre 1911 y 1929.
En ese año, Racing consiguió cuatro marcas que aún superan a la actual: la más amplia, de 17 triunfos al hilo, entre 1918 y 1920, 15 partidos de Liga y dos de Copas; en 1915 consiguió 14 victorias seguidas; entre 1920 y 1921, 13; y en 1914, 12. Por eso, Gago es récord como entrenador de Racing.
Aquellos 17 éxitos al hilo de Racing entre 1918 y 20 es la segunda mayor marca en la historia del fútbol argentino. La primera le pertenece a Boca que entre esos mismos años ganó 21 entre la Liga y las copas. Justo en 1919 se produjo la segunda escisión de nuestro fútbol, el Xeneize continuó en la Asociación Argentina (con afiliación a la FIFA) y la Academia fue uno de los fundadores de la Asociación Amateurs.
En estos tiempos convulsionados, hubo muchos partidos disputados que luego fueron anulados. Por eso, en algunas estadísticas se cuentan solo 16 entre el encuentro que perdió 2-0 con Racing el 7 de agosto de 1919, justo antes de la ruptura dirigencial, y el empate 2-2 con Sportivo Almagro el 4 de abril de 1920, encuentro que luego fue declarado “no jugado” por la Asociación ya que el Tricolor no había completado la mitad de los partidos.
Las de Boca y la de Racing fue las series más exitosas de las tres primeras década del fútbol argentino. Ya en tiempos de profesionalismo, a partir de 1931, solo ocho veces un club ganó 10 o más partidos.
Independiente, 14 (1938-39)
El Rojo, de Juan José Maril, Vicente de la Mata, Arsenio Erico, Antonio Sastre y Juan José Zorrilla, terminó conquista a toda orquesta el torneo de 1938, con 10 triunfos consecutivos en las últimas 10 fechas (51 goles a favor y 10 en contra). El técnico era Guillermo Ronzoni. Como campeón del fútbol argentino, el 29 de diciembre jugó la final de la Copa Ricardo Aldao con Peñarol, campeón uruguayo, al que venció 3-1. También, la final del Campeonato Argentino (Copa Carlos Ibarguren), el 4 de febrero de 1939, ante Central, al que goleó 5 a 3. Luego, ganó los dos primeros encuentros del torneo de 1939. La racha se cortó el 2 de abril, ante Racing (0-2).
Boca, 13 (2006)
El ciclo de Alfio Basile en Boca fue inolvidable. Ganó los cuatro torneos que disputó. Y en 2006, antes de partir hacia la Selección Argentina, hilvanó 13 triunfos al hilo. Con un asterisco porque uno de los encuentros estuvo en el banco Jorge Ribolzi. Ganó los últimos siete del Clausura 2006 y los primeros 5 del Apertura 2006. En la quinta fecha, el 3 de septiembre, cuando venció 2-0 a Estudiantes, el técnico fue el Ruso porque el Coco estaba arrancando su segundo ciclo en el seleccionado (0-3 con Brasil en Wembley). Al regreso, estuvo en la sexta fecha ante Gimnasia, el 10 de septiembre. Pero el partido se suspendió al finalizar el primer tiempo (perdía 1-0) por las amenazas que sufrió el árbitro Daniel Giménez en el entretiempo. Luego, se jugaron los dos partidos de la Recopa Sudamericana ante San Pablo de Brasil. En la ida, ganó 2-1 y fue el decimotercer triunfo. La revancha, igualó 2-2 y fue campeón. Lo reemplazó Ricardo La Volpe, que estuvo en la reanudación con Gimnasia (4-1). En ese torneo, Boca perdió los últimos dos partidos, tuvo que jugar un desempate con Estudiantes, que se coronó campeón en cancha de Vélez tras ganar 2-1.
San Lorenzo, 11 (1935)
El Ciclón hizo una gran segunda rueda en el torneo de 1935, el primero desde la creación de la actual AFA tras la fusión de la Liga Argentina de Football y la Asociación Amateurs, pero no le alcanzó para sacarle el bicampeonato a Boca. Incluso finalizó tercero porque el subcampeón fue Independiente. Las once victorias fueron todas por el torneo de Primera División ya que aquel año la nueva AFA aún no había organizado copas. Fue clave la incorporación como director técnico de José Hipólito Fossa para la mejora del equipo, hasta ese momento entrenado por Antonio Malvassi, y que en el primer semestre de 1936 conquistó la Copa de Honor.
San Lorenzo, 11 (1941)
Otra gran campaña en la que San Lorenzo no pudo redondear con un título, ese año en manos de River Plate (le sacó 4 puntos de ventaja). Para esa temporada, en reemplazo de Guillermo Stábile, llegó el húngaro Emérico Hirsch (ex Gimnasia y River). No tuvo un buen comienzo ya que perdió los dos primeros encuentros. Pero luego construyó la serie de 11 victorias, con goles del vasco Isidro Lángara en 9 de ellas. La racha se cortó con un empate ante Estudiantes (1-1).
San Lorenzo 10 (1933)
En la etapa final del primer campeonato profesional que ganó, el Ciclón hilvanó ocho victorias del torneo y dos de la Copa de Competencia. Tuvo una particularidad aquel comienzo. El entrenador contratado a principios de temporada fue un húngaro Alberto Medyegsi, apodado Marinetti. La Memoria y Balance de San Lorenzo de ese año explica los cambios: “A los efectos de una mejor preparación de los equipos, se tomaron a prueba los servicios del entrenador Eugenio Medyegsi (Marinetti), quien llegó precedido de fama. Sus métodos en nada variaron a los que aquí ya se conocían, por lo que resultando gravosa su actuación, con relación a su rendimiento, se optó por prescindir de sus servicios. En reemplazo del anterior, se designó al señor Atilio Giuliano, viejo amigo del club y conocedor de fútbol, que va desempeñándose a satisfacción, vigilando en su tarea por la subcomisión respectiva. Siguió desempeñando sus servicios como masajista, el señor Antonio Malvassi”.
El gran animador del torneo de ese año fue Gimnasia La Plata, el famoso expreso, dirigido por el húngaro Hirsch. Pero después del famoso 7-1 en el que los jugadores triperos se sentaron en el campo de juego como protesta por la actuación del árbitro Alberto Rojo Miró, San Lorenzo se encaminó hacia el título.
Estudiantes, 10 (1967)
“Osvaldo Zubeldía cambió todo, el tiro libre, el córner, todo, todo”, contó siempre Carlos Salvador Bilardo, su discípulo. El Pincha construyó su primera gran racha de triunfos consecutivos en los momentos decisivos del Metropolitano de 1967, el torneo en el que logró romper la hegemonía de los cinco equipos grandes que habían sido campeones en el profesionalismo. En la última fecha del torneo, Estudiantes venció 3 a 0 Gimnasia. Luego, ya en semifinales, perdía 3-1 con Platense y logró un épico 4-3, que fue el principio de todo lo que logró después. En la final, derrotó a Racing 3 a 0. Y empezó el Nacional de 1967 con siete triunfos seguidos. Al año siguiente nació la mística copera pincha.
River, 10 (2003)
El ingeniero Manuel Pellegrini había logrado una racha de 12 victorias seguidas con San Lorenzo en 2001, solo por el torneo de Primera División, interrumpida en general por las copas internacionales. Llegó a River para el Apertura 2002. En la segunda parte de la temporada, en el camino hacia el título del Clausura 2003, logró seis victorias al hilo entre la quinta y la décima fecha, y otras cuatro en la fase de grupos de la Copa Libertadores, en la que fue eliminado en cuartos de final por el América de Cali.
Estudiantes, 10 (2006)
El Pincha había sido el último equipo en ganar 10 partidos consecutivos. Lo hizo inmediatamente después de que se cortó la racha de Boca, al que finalmente le arrebató el tricampeonato y se quedó con el Apertura 2006. Dirigido por el Cholo Diego Simeone, Estudiantes empató la racha el 22 de septiembre, cuando venció 2-1 a Independiente y llegó al décimo triunfo el 25 de noviembre ante Racing (2-0). Luego empató 2-2 con Argentinos. En la última fecha derrotó 2-0 a Arsenal y alcanzó a Boca en el primer puesto. En el desempate, en cancha de Vélez, se impuso 2-1 y dio la vuelta olímpica.